Factores y Consejos a tener en cuenta para determinar la Ubicación de tu invernadero
Para decidir la ubicación de un invernadero debes tener en cuenta diversos consejos y factores que pueden condicionar el éxito de tu cultivo:
1- La cantidad de Radiación Solar que llega al invernadero
Como las plantas realizan la fotosíntesis, debes garantizar que disponen de la suficiente radiación solar que necesitan para su crecimiento.
Si por la ubicación en la que deseas montar tu invernadero las plantas reciben una radiación solar baja, las plantas de verán afectadas porque su fotosíntesis también se verá reducida y crecimiento será más lento, pudiendo darse casos de aborto de flores y frutas.
Esta situación podría obligarte a tener que aportar luz artificial adicional, lo cual incrementaría tus gastos.
2- La Cantidad de Agua requerida para el cultivo
Como no puede ser de otra forma, debes valorar las necesidades de agua que va a requerir tu cultivo, para planificar cuales van a ser las fuentes de abastecimiento necesarias y su proximidad a los puntos de suministro.
Necesitarás, por una parte, agua para el riego, y seguramente, según tu ubicación, agua para refrigerar el interior del invernadero en periodos del año muy cálidos.
Un buen consejo es intentar reciclar el agua para optimizar el uso eficiente, pero debes purgar agua del enfriador para reducir la potencial acumulación de sal que se genera.
También debes analizar el agua inicialmente, para evaluar los niveles de sal y pH (influye en el crecimiento y la producción de tu cultivo) que tuviese la que está disponible en el punto de suministro; no es lo mismo el agua potable del grifo de casa, que captarla de un rio, manantial o lago cercano al invernadero.
3- La Altitud del terreno disponible
La altura respecto al nivel del mar, o altitud, afecta a las temperaturas altas en el verano y a las temperaturas bajas en el invierno, y por ello, influirá de forma significativa en tus costes de enfriamiento y calefacción.
Si tu invernadero está en una altitud elevada, te ofrecemos a continuación unas recomendaciones adicionales para controlar la temperatura:
– Cuando haga frio excesivo:
- Coloca botellas de plásticas con agua alrededor de las plantas, cuando haga frío en el exterior del invernadero. El agua de las botellas se calientan por el día, y ayudarán a mantener el calor cuando la temperatura baje por la noche.
- Instala un termómetro de alarma programable y colócalo dentro del invernadero durante los meses fríos para alertarte cuando haya un descenso térmico. Un consejo es colocar un calentador cerámico dentro del invernadero para ayudar a subir la temperatura interior.
– Cuando haga calor en exceso:
- Si tu invernadero dispone de estructura rígida, usa una apertura de ventilación automática para controlar la calefacción. Si no lo fuese, siempre puedes abrir una puerta o ventana para permitir la reducción de calor interior.
- Durante el verano, usa un sistema de agua automático, si es posible; uno que incluya un nebulizador. Durante el invierno, desconecta todas las mangueras para evitar la congelación de los tubos, y en su lugar utiliza un método de riego manual.
4- El microclima en el que encuentre tu invernadero
Aparte de la altitud y la latitud , otros muchos factores pueden afectar al ambiente interno de tu invernadero.
Por ejemplo, la proximidad o lejanía al mar o al océano, condiciona la suavidad o brusquedad que se puede llegar a producir durante el día y la noche, o durante los cambios de estación. Por ejemplo, en la provincia de Valencia, España, que está junto al Mar Mediterráneo, presenta una fluctuación de temperatura mucho menor, entre el día y la noche, que por ejemplo, Cuenca, ubicada en el centro de España, muy alejada de grandes masas de agua y cuyas temperaturas pueden fluctuar entre el día y la noche (en enero de 2017 se midió una temperatura mínima de -12,3ºC y una máxima de 17,4ºC, lo que arroja una diferencia entre ambos valores extremos de casi 30 grados en un solo día).
También debes tener presente el «efecto pantalla» que ejerce la presencia cercana de árboles, montañas, y otras obstrucciones cercanas a tu estructura, las cuales pueden proyectar sombra sobre el invernadero, especialmente en las mañanas.
Respecto a las montañas, ojo con ellas, ya que pueden influenciar en el patrón del viento y las tormentas.
Otras consideraciones ambientales son las nubes y la niebla que pueden formarse en ciertas horas del día, en áreas específicas, reduciendo la entrada al invernadero de luz solar y en consecuencia , ejercer un efecto negativo en la fotosíntesis; vientos fuertes, los cuales pueden causar daños estructurales y absorber el calor del invernadero; polvo y arena, que pueden arañar la superficie del invernadero; y por último, la nieve y el granizo.
5- La potencial presencia de Plagas procedente de cultivos cercanos
Sin duda te recomiendo que escojas un sitio lo más alejado posible de otras áreas agrícolas de producción, ya que puede llegarte una plaga procedente de ella. Si no puedes evitarlo, como alternativa, crear una zona de apantallamiento entre tu invernadero y otras áreas de producción agrícola, esto te ayudará a prevenir una infestación de plagas que dañe tu cultivo de forma irreversible.
6- Estabilidad del terreno disponible
Que la base de la superficie en la que se apoyará el invernadero sea estable es algo realmente crítico.
Asegúrate de que tu terreno esté bien asentado y tenga una pequeña pendiente para el correcto drenaje del agua, pero ojo, que no sea excesivo, como en la imagen inferior de la derecha.
Consejos sobre la ubicación y orientación de un invernadero
A continuación te voy a proporcionar algunas consideraciones que debes tener en cuenta respecto a la ubicación y orientación que debe tener tu invernadero.
Para ello, te voy a dar unos consejos básicos:
1- El invernadero debe estar siempre orientado hacia el sur, para asegurarte de que dispondrás de la luz adecuada para tu cultivo
2- Busca la ubicación que permita recibir mayor cantidad de luz por las mañanas, siempre más que por las tardes. Ten en cuenta las estructuras y árboles de alrededor, sobre todo pensando en el invierno, donde la luz entrará a tu invernadero en un ángulo diferente, y los árboles perennifolios no pierden las hojas fácilmente.
3- Acércalo lo suficiente a una fuente de suministro eléctrico para disponer de electricidad cuando sea necesario (uso de ventiladores, iluminación nocturna, etc.)
4-Valora el drenaje del terreno y su irregularidad: tener en cuenta estos dos factores condiciona que en futuro tengan problemas de encharcamiento, y sobre todo, te permitirá valorar si requieres rellenar previamente al montaje potenciales hoyos o huecos que estén presentes en la superficie.
En este video puedes informarte sobre la orientación y ubicación de un invernadero
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Hola, me presento, porque si has llegado hasta aquí, sin duda lo mereces. Mi nombre es Ángel Martínez, y soy biólogo y tecnólogo de los alimentos. Mi interés en este blog es crear contenidos para vosotros, que sea lo más útil posible a los usuarios interesados, de forma que se fomente la producción agrícola sostenible, en particular, de productos que puedes obtener en invernaderos, como frutas, verduras, hortalizas, plantas aromáticas y plantas florales, que tanto nos encantan y alegran nuestra vida.
